Doce Setenta, La cerveza que nace en una mina
La primera vez que oí hablar de que en una mina se elaboraba cerveza supe que tarde o temprano iría a conocerla. Me encanta conocer lugares curiosos y éste estaba segura de que me iba a gustar. Y así fue, en la comarca vecina de Laciana podemos realizar una visita para conocer la historia de la mina y la elaboración de la cerveza Doce Setenta.
Doce Setenta podía haber nacido en cualquier nave industrial de alguna ciudad española. Tendría buenas comunicaciones y seguro que menos gastos, pero no tendría el carácter que le da el haber sido elaborada en una mina. Una mina que forma parte de la historia de este valle. El carbón ha formado parte de la vida de todos los lacianiegos y son varias las generaciones que han trabajado en sus minas.

Cervecería Doce Setenta
Dónde se encuentra
En el valle de Laciana, el lugar donde el oso y el urogallo viven en libertad, y rodeado de exuberantes paisajes se encuentra el complejo minero Lumajo.
La cervecería Doce Setenta está ubicada en el margen izquierdo de la carretera, a mitad de camino entre Villaseca de Laciana y Lumajo.
Aparcamiento
Hay dos zonas donde puedes dejar el coche. Dos grandes aparcamientos de tierra que se encuentran en el lado izquierdo de la carretera. En el primero accedes a la cervecería a través de unas escaleras, y en el segundo, que se encuentra unos metros más adelante, aparcas donde están las oficinas y la fábrica.
La cerveza se elabora en las antiguas instalaciones mineras del grupo Lumajo. La mina, que cuenta con más de cien años de historia, tiene 34 km de galerías.
Juan José Villanueva y Abel Díaz compraron esta mina abandonada antes de tener muy claro el uso que le iban a dar.

Entrada a la mina
Proyecto social
Doce Setenta nació como un proyecto social para promover la formación de empleo en Laciana. Esta zona, que ha vivido muchos años de la minería, ha visto mermado el trabajo y el número de habitantes en estos últimos años tras el cierre de las explotaciones mineras de carbón. Con este proyecto social se pretende revitalizar el valle. Ya hay algún proyecto que se ha unido a esta iniciativa.
Su eslogan y sus colores
Las leyendas nunca mueren. Está relacionado con todos los héroes que bajaron día a día al tajo. No olvidan el pasado, la historia de la mina y lo valores que compartían los mineros: compañerismo y unidad al entrar en ella.
En sus etiquetas los colores son: rojo por la sangre derramada, negro por el carbón de la mina y dorado por el color de la cerveza.

Cerveza 12-70
Su nombre, Doce Setenta
Se debe al año 1270, que fue muy importante para la historia del valle. El 24 de marzo de 1270, el rey Alfonso X el Sabio otorgó con un documento llamado Carta Puebla una serie de privilegios como la inmunidad y libertad ante los condes de Luna y de Toreno que querían conquistar el Valle de Laciana. Desde ese momento se conoce a este valle como el Valle de la Libertad.
La Cervecería Doce Setenta
Antiguos cuartos de aseo
La visita comienza en esta zona, donde aún podemos ver las poleas en el techo en las que los mineros colocaban la ropa mojada al salir de la mina en un recipiente de metal y la elevaban para su secado en la parte de arriba, que era la zona con más calor.
Aquí se encuentran, de un lado, los tanques de aluminio y la embotelladora, y de otro, los palets de cervezas listos para su venta. En el medio, una pared donde podemos ver las placas con los nombres de algunos de los mineros que por desgracia perdieron la vida en las minas de la comarca. No están todos, pero poco a poco van a ir ampliando este homenaje a los trabajadores del valle de Laciana.

Muro homenaje a los mineros
Agua, malta, lúpulo y levadura. Estos cuatro ingredientes son los necesarios para la elaboración de esta cerveza artesana. El agua, que proviene del arroyo que se encuentra a cien metros de la fábrica, y el resto de ingredientes, que son de una calidad excelente, son el secreto para conseguir una buena cerveza. Doce Setenta elabora una lager y una tostada, la doppelbock. Durante la visita también probamos la cerveza ahumada, de venta exclusiva allí y por internet. Entre sus novedades está la 992, una producción de 2000 botellas que se han elaborado en el interior de la mina a más de 200 metros de profundidad.
Los valores que ya se conocía a los mineros continuán con la sinergia entre los ganaderos y el equipo de Doce Setenta. El bagazo de la malta de cebada, que se produce durante la elaboración de la cerveza, se utiliza como pienso animal. Lo donan a los ganaderos de la comarca, que previamente se apuntan a una lista, y cada semana les regalan entre 900 y 1000 kg.
Bocamina
La mina es un plano inclinado de unos 45º. Una vez que te adentras en ella y la puerta se cierra, la oscuridad se cierne sobre nosotros. Tus sentidos se agudizan, la temperatura baja y el agua suena con fuerza. Te das cuenta de que no estás en una recreación de una mina. Es una mina de verdad donde los mineros bajaban todos los días para llevar un sueldo a casa.
Aún podemos ver los raíles por donde subía la vagoneta y, en el techo, los hierros y el hormigón que sostienen la galería.
Al final de la zona hasta donde podemos acceder podemos ver una veta de carbón.

Interior de la mina
Visita guiada
La visita dura aproximadamente unas dos horas y media y nuestro guía fue uno de los dueños, Juan José Villanueva. El entusiasmo y la pasión con la que nos cuenta su proyecto es contagioso.
La visita también la puedes hacer con niños. Es una visita muy entretenida y a ellos les darán un vaso de refresco. Alucinarán cuando entren en la mina.
Las personas con movilidad reducida no pueden entrar a la mina. El plano inclinado hace que sea complicado el acceso.
Es una visita muy interesante de la que salimos todos encantados. Al final compramos un pack de doce cervezas porque durante la visita podrás catar un par de ellas y comprobarás que están riquísimas. También puedes comprarlas en su tienda online y la verás en lineales de supermercados de toda España.
Te recomiendo que reserves con antelación la visita, lo puedes hacer aquí.

Compra productos locales
El futuro de Doce Setenta
Son varios los planes de futuro a corto y medio plazo que tienen en mente. Para septiembre u octubre tendremos novedades en la mina. Doce Setenta ha llegado a un acuerdo con el grupo Viloria (dueños de los derechos de explotación del subsuelo) para poder ofrecer catas de cerveza a más de 250 metros de profundidad. Algo único en el mundo.
Con un casco y una lámpara bajaremos en la mina 258 metros y allí el maestro cervecero nos hará una cata. Pero hay muchas más sorpresas preparadas, para descubrirlas tendrás que ir y comprobar las novedades.
Qué ver cerca
Cascada de Lumajo o de las Cereizales
Si continúas la carretera, un poco más adelante, se encuentra una preciosa cascada. Aunque hay pocos lugares para dejar el coche, lo puedes hacer en alguna zona un poco más ancha, merece la pena parar a verla. El río Almuzarra salva un desnivel de casi 20 metros de altura. La cascada puedes verla desde la carretera.
Para acceder a ella hay un panel informativo de la cascada y desde allí sale un camino. Lo primero que ves es una puerta fabricada con un somier de una cama. El trayecto hasta la cascada es de 200 metros de bajada en la que hay que tener cuidado para no resbalar. Es una cascada en la que el agua baja de forma escalonada salvando diferentes desniveles. Hay una pequeña zona donde bañarse. Eso sí, el agua sólo es apta para valientes.

Cascada de Lumajo
Lumajo
Este pequeño pueblo, donde termina la carretera, es una visita recomendable si estás en la zona. Lo llaman el balcón de Laciana porque es el pueblo que se encuentra a mayor altitud.
Desde el pueblo puedes realizar una ruta hasta el pico del Cornón y al puerto de La Almuzarra. El pico del Cornón es el pico más alto de Laciana, tiene una altura de 2.194 metros.

Lavadero Lumajo

Vistas desde Lumajo
¿Te vas a perder la experiencia de conocer dónde se elabora la cerveza Doce Setenta?