Juego de Tronos en España: Itálica
Hola a todos los viajeros y amigos de Curiositravel. Mi nombre es Pedro, soy bloguero en Turviaje.com, y hoy escribo como invitado en el blog de Cris (algo que me hace mucha ilusión) para compartir con vosotros un artículo sobre uno de los lugares donde se ha rodado Juegos de Tronos en España: Itálica, en Sevilla.
¿El porqué de escribir como invitado en este blog? Pues bueno, me parece que esta chica amante de los viajes está haciendo un grandísimo trabajo dando a conocer muchos lugares del mundo. Por eso le escribí para que me dejara compartir con vosotros alguna de mis experiencias.
Para mí es un placer haceros partícipes de un pequeño fragmento de mi visita a Itálica que espero que os guste.
Como supongo que sabéis (no quiero hacer spoiler del malo a nadie), Itálica es uno de los lugares que han aparecido en la última temporada de Juego de Tronos, es un lugar que también ha sido escenario de muchas películas de época romana y recientemente está optando a ser Patrimonio Mundial.
Itálica, la primera ciudad fundada fuera de la Península Itálica
La primera ciudad fundada por los romanos en Hispania y también la primera lejos de la Península Itálica, con cuya fundación comenzó la conquista de la Península Ibérica.
Al finalizar la segunda guerra púnica, Escipión el africano asentó a los heridos en una antigua ciudad turdetana, que sería el origen de Itálica. Nadie imaginaba entonces que esta ciudad sería el origen de un imperio.
Cuando llegas al complejo te imaginas un lugar en ruinas, colapsado por turistas y con unas dimensiones que puedes ver en un par de horas, pero nada más ver la cantidad de coches que hay en el aparcamiento sabes que todo eso es mentira.
En la entrada ya te das cuenta de que es un lugar muy visitado, pues los suvenires no están emplazados en tiendecitas, sino en puestos callejeros. Hay cola para entrar, pero siendo ciudadano de la Unión Europea la entrada es gratuita, eso es algo maravillosamente increíble, y aunque debería ser normal, como sabéis, siempre importa el dinero.
Nada más cruzar las puertas comienzas a tomar conciencia de dónde estás, de la importancia del lugar y mientras avanzas entre grupos turísticos, niños correteando y jóvenes que como yo deseaban pasar un fin de semana matando la curiosidad vas descubriendo lugares que satisfacen ese sentimiento.
El conjunto arqueológico de Itálica
Parece mentira lo que puedes descubrir en el complejo, algunos lugares que tienen mucha fama de haber sido cuna de la Roma hispánica son bastante más pequeños.
Cuando vas a Itálica descubres que es inmensamente grande, aunque las zonas que puedes visitar, es decir que tienen algo especial que ver, son poquitas. Pero el conjunto en si es grandísimo, hay 38 hectáreas. Sí, 38, es una pasada.
Y creo recordar que sólo está excavado menos de un 50 por ciento y que todas las casas de la alta aristocracia están aún por descubrir. La llanura que llega desde lo que hay descubierto hasta Santiponce está delimitada para futuras excavaciones, con lo que imaginaos lo inmensa que tuvo que ser Itálica.
Es aquí donde podemos contemplar gran parte de lo que Itálica significa.
Casa de la Exedra
Nada más llegar la podemos ver, contaba con 4000 m2 y estaba dedicada a un collegium. Era un edificio semipúblico en el que además vivían sus dueños.

Casa de la Exedra
Casa de Neptuno
Justo al lado tenemos este lugar increíble con sus 6000 m2, que también estaba dedicado a un domus y cuyo nombre proviene de los mosaicos de Neptuno que podemos encontrar en el interior.
Todas estas construcciones gigantescas poseían tabernaes (locales comerciales) y lugares para el ocio, con lo cual eran lugares predilectos en la ciudad y en ellos vivían además los dueños. Su utilización como edificios semipúblicos implica que fueran desarrollados además para el bienestar de la sociedad que allí se congregaba. Además, se cree que era allí donde se reunían los hombres de la misma profesión y realizaban cultos a sus dioses e incluso para formarse y aprender.

Casa de Neptuno
Casa de los Pájaros
Seguidamente nos encontramos este edificio, llamado así por los mosaicos de los pájaros que podemos ver en su interior. En el centro se hallaba el jardín, viridarium. Debajo de éste estaba el aljibe subterráneo que captaba el agua de la lluvia recogida por el tejado. En el jardín también se hallan los restos de un pilón y un lararium, altar dedicado a los lares, deidades protectoras del hogar.
La habitación más grande de la casa es el triclinium, con unos 90 m2, situado en el eje principal enfrentado al vestíbulo. En él se realizaba el coniuium, banquete social. Al fondo de la casa se halla la zona privada donde estarían los dormitorios, cubículo, en torno a dos patios columnados. Aquí es donde claramente podemos ver las diferencias entre las casas de los ricos y de los más pobres de la época.

Casa de los Pájaros
Continuando con el paseo, llegamos al que para mí es uno de los mejores lugares de todo el conjunto.
Casa del Planetario
Aunque no posee las dimensiones de las anteriores, el lugar tiene un halo distinto, algo peculiar, no sé si será por la conservación casi perfecta de los mosaicos, en especial el del planetario que refleja los días de la semana a través de los dioses que dan nombre a cada uno de esos días.
O tal vez por las cruces gamadas en el mosaico de medusa e incluso quizás por estar rodeado de los mercados y las casas artesanales. Pero es un sitio especial y una de las casas más importantes debido a su situación. Al alzar la vista desde aquí se pueden contemplar perfectamente las áreas delimitadas para próximas excavaciones, y es algo extraordinario. Como ya dije anteriormente, Itálica es inmensamente grande.

Casa del Planetario
Estatua de Trajano

Estatua de Trajano
Ahora volviendo por nuestros pasos hasta la parte más alta de la antigua ciudad, y desde donde podemos ver la ciudad de Santiponce, nos topamos con la estatua heroica de Trajano, en un lugar que parece que fue un templo dedicado a este emperador romano que, por cierto, nació aquí.
Pero no solo Trajano nació en Itálica. También el famoso emperador Adriano, sobrino del anterior y quien construyó el templo, nació en esta colonia a la que él le concedió este grado, e incluso hubo un tercer emperador que nació en estas tierras, Teodosio I El Grande. Itálica entonces alcanzó un esplendor increíble, ayudando en la expansión del imperio por el mundo conocido y a la conquista de Hispania.
Después de ver todo el conjunto arqueológico llega la hora de visitar el mayor atractivo de la ciudad romana de Itálica.
El Anfiteatro o Pozo Dragón en Juego de tronos
Cuando llegas a las puertas de este lugar sientes la magia, comienzas a pasear como Daenerys Targaryen, Cersei, Tyrion y Jaime Lannister entre las rocas caídas que antaño eran las grandes puertas del anfiteatro.
Te sientes frío como la sangre de John Snow, mientras imaginas el nivel de efectos especiales que han conseguido creando al dragón encima de las gradas del anfiteatro de Itálica.
Cuando se construyó, la puerta del anfiteatro media más de 12 metros de altura. Antes de llegar a la arena encontramos unas huellas en uno de los laterales al lado de la puerta, son los denominados exvotos y están dedicados a la diosa Némesis, la diosa de la venganza. La curiosidad de esto es que algunos tienen dedos pintados y otros no, según explicó uno de los guías (no sé si será cierto), los que tenían dedos pertenecían a gladiadores vivos mientras que los que no tenían los dedos dibujados a los muertos en combate.
Continuando por el corredor que lleva a la zona de la arena donde esos gladiadores lucharon por su vida, tanto entre ellos como con las fieras, podemos ver la magnitud del anfiteatro. Es aquí donde se produce la entrada triunfal de los personajes de Juego de Tronos en el que es un punto álgido en la séptima temporada de la serie.
El anfiteatro posee tres graderíos con capacidad para unas veinticinco mil personas, una zona muy extensa de arena y una gran fosa en la que se guardaba todo lo necesario para los espectáculos, además de las jaulas de las fieras.
Es aquí donde tiene lugar la escena de Juego de Tronos de Pozo Dragón, en donde todos los bandos se reúnen antes de ir a la guerra contra los caminantes blancos.
Cuando pisas la arena sientes esa sensación de verte rodeado de miles de personas gritando, mientras las puertas se abren y entra tu contrincante para luchar contra otro hombre u otra fiera. Al recorrer los pasillos que se sitúan bajo las gradas miras con angustia el temor de esos hombres que estaban dispuestos a morir para salvar sus vidas mientras veían como sus compañeros caían en la misma arena que tú estás pisando ahora mismo.

Anfiteatro de Itálica
Cada rincón de ese lugar tiene una historia, que aunque alejada ahora más de dos mil años de nosotros, nos ha repercutido hasta tal punto que aún tenemos un trocito de esa violencia dentro de nuestro ser.
Llega el momento de subir a la parte alta y desde allí, en uno de los atrios, pararme a observar la arena, el foso de las bestias y en mi mente imaginar cómo sería estar allí sentado mientras miles de personas vitorean a los gladiadores, convirtiéndose en un instante en los jueces y verdugos de la vida de un hombre que ha luchado hasta la extenuación.
Es en esta posición cuando descubres la importancia de estos recintos para los romanos, es el lugar donde se tiene el poder de decisión sobre algo más grande que uno mismo y, tal vez, ese sentimiento fuera lo que construyó un imperio.
Es en estos momentos cuando entiendo por qué el equipo de localización de Juego de Tronos eligió éste como uno de los sitios para esta séptima temporada.

Vista desde arriba del Anfiteatro de Itálica
Hasta pronto Itálica, se acerca el invierno.
Al igual que ocurrió con los protagonistas de la mejor serie que he visto hasta ahora, debo despedirme de Pozo Dragón para marchar hacia otras tierras en busca de otras maravillas que ver.
Por eso llega el final, y tan solo quiero agradecer de nuevo a Curiositravel que me haya dejado publicar este humilde artículo en su gran blog, que espero sigáis leyendo y dejándole comentarios.
Como siempre digo en mis post, estos pequeños tesoros que nos descubren series como Juego de Tronos es imprescindible que los visitemos e incluso escribamos sobre ellos, para darlos a conocer al mundo.
Así que amigos de Curiositravel, espero que os haya gustado el post. Un Saludo y nos vemos en el camino.
Pedro E. Juzgado Turviaje.com
Este es un post invitado de Pedro E. Juzgado, otro apasionado de los viajes como yo, al que puedes seguir en su blog Turviaje.com. En él encontrarás sus aventuras y experiencias viajeras, alabando o criticando a los responsables del cuidado del patrimonio cultural según el cuidado que tengan. Ha sido todo un placer que colaborara en este blog con un tema que me gusta tanto como es el Turismo Cinematográfico. ¡Muchísimas gracias!