Estatuas de cuentos
¿Te gustan los cuentos infantiles?
Estos tienen sus raíces en historias que han pasado de padres a hijos para advertirles de peligros y divulgar buenos valores. Hay muchos cuentos que con el paso de los años se han ido suavizando, como es el caso de Caperucita Roja. De esta historia hay varias versiones, entre ellas la de Charles Perrault, en la que Caperucita es devorada por el lobo, con la moraleja de que no se debe hablar con extraños. O la de los hermanos Grimm, en la que el leñador saca de la barriga del lobo a Caperucita y a su abuelita y viven felices para siempre.
¿Quieres conocer dónde están las estatuas de algunos cuentos clásicos? Aquí te mostramos algunas de ellas:
Peter Pan en Londres
La podemos ven en los Jardines de Kensington, pero hay siete copias repartidas por el mundo: Bruselas, Perth, Toronto, Liverpool, Canadá, New Jersey…
Es una estatua de bronce en la que aparece Peter Pan, el niño que no quería crecer, tocando la flauta.
Hay un par de datos curiosos sobre esta estatua: una es que se supone que está ubicada en el lugar donde James Matthew Barrie, su creador, se inspiró viendo jugar a los hijos de sus amigos. Y la otra es que se colocó la noche del 30 de abril de 1912 por su creador. Ese mismo día se había publicado un artículo en un periódico en el que contaba que, en Kensington Gardens, a los niños les esperaba una sorpresa para la festividad de los Mayos.

Peter Pan en Londres
A Caperucita Roja la podemos ver en Argentina, Barcelona y Múnich
La Caperucita Roja de Buenos Aires está hecha en un solo bloque de mármol blanco y no supera los dos metros de altura. Lleva en una mano una cesta y en la otra un ramo de flores. Detrás de ella podemos ver al lobo.
La de Barcelona está situada sobre una fuente en el Paseo de San Joan. Es una estatua de bronce en la que aparece Caperucita acariciando al lobo.
Y por último, la Caperucita Roja de Múnich, que también está esculpida en bronce. En ella vemos a Caperucita con el lobo detrás. Está colocada encima de una fuente, con cuatro bocas de lobo por la que sale el agua. Esta estatua se debe a que los hermanos Grimm, escritores alemanes, cambiaron la historia para convertirla en un cuento con final feliz. Por si vas a Múnich te dejo el post de «Qué hacer en Múnich con niños».

Caperucita Roja en Múnich
La Sirenita en Cophenague
Inspirada en el cuento de Hans Christian Andersen, es el símbolo de la ciudad y se encuentra sobre una roca en el puerto. La estatua está esculpida en bronce, mide poco más de un metro y pesa cerca de 175 kilos. Fue un encargo de Carl Jacobsen, hijo del fundador de la cerveza Carlsberg, y donada a la ciudad.

La Sirenita en Copenhague
Alicia en el país de las Maravillas en Nueva York
La protagonista de Alicia en el país de las maravillas se encuentra en Central Park. En ella aparecen también el Sombrerero Loco, el Conejo Blanco, el Gato de Cheshire y otros personajes. Alicia está sentada sobre una seta gigante jugando con un gato que tiene en su regazo. Está especialmente diseñada para que los niños escalen sobre ella.
Alrededor de la escultura hay placas de bronce con fragmentos de la novela.
El escultor de esta preciosa estatua era español: José de Creeft.

Alicia en el País de las Maravilla en Central Park
Los Músicos de Bremen en Alemania
Estos personajes de este popular cuento de los hermanos Grimm se encuentran en la ciudad con el mismo nombre.
¿Te acuerdas de su historia? Los cuatro animales (burro, perro, gato y gallo) huyeron de sus dueños porque querían sacrificarlos, y cuando se encuentran deciden viajar juntos a Bremen. En la escultura aparecen subidos unos encima de otros porque en el cuento se colocan así para parecer un enorme monstruo y asustar a unos bandidos.

Los Músicos de Bremen
El Flautista de Hamelin en Alemania
La estatua está situada en Hamelin, ciudad que realmente existe, y es mundialmente conocida por su belleza y sobre todo por el cuento.
En el ayuntamiento de dicha ciudad es donde está ubicada la estatua, en la que aparece el flautista tocando su instrumento. A las que echamos de menos son a las ratas que en el cuento, cuando tocaba la flauta, iban caminando detrás de él.

El Flautista de Hamelin
¿Has visto alguna de estas ? ¿Conoces otras estatuas de cuentos? Me gustaría mucho que me contaras.
Buenísimo el articulo. Saludos.
Muchas gracias por tu comentario
Una de blancanieves en Barcelona y otra dedicada a Walt Disney en el zoo de Madrid con Bambi, Dumbo, a demás de las del propio parque de París de varios personajes en pequeño y la grande de Walt Disney con Mickey de la mano
No las conocía, muchas gracias por contarme