Senderismo en el Bierzo: La Senda del Mouro
La Senda del Mouro es una ruta para admirar el arte en la naturaleza. En un bosque de ensueño nos encontramos con varias obras de arte integradas en él. Algunas de las que podemos ver son dibujos en rocas y en árboles, esculturas realizadas con palos o la casa del Mouro.

Intervención artística Senda del Mouro
Pero, ¿sabes lo que son los Mouros?
Son unas criaturas mitológicas del noroeste de la península. Se parecen físicamente a los humanos pero son mucho más grandes. El color de su piel es oscuro debido a que viven en el subsuelo y dicen que se dedicaban a la minería.

Casa del Mouro
La idea de esta ruta fue de un vecino de Labaniego, Javier Ortiz Trapote, y está abierta a nuevos artistas. Es más, ya se han sumado un par de ellos a esta exposición al aire libre.
Ubicación
La Senda del Mouro parte del pueblo de Labaniego. Ubicado en el Bierzo Alto, es una localidad que pertenece al municipio de Bembibre. Se encuentra a 7 km de Bembibre y a 25 km de Ponferrada.
Este pueblo dispone de varias casas rurales donde podrás alojarte y realizar alguna de las rutas que hay en los alrededores. Sus casas son de piedra y los tejados de pizarra.
Distancia de la ruta
La ruta tiene una distancia de 2,5 km. Es una ruta muy sencilla y sin grandes desniveles.
Ruta con niños
Es una ruta perfecta para hacer con niños, el sendero por el que transcurre no entrama ningún peligro.
Mejor época para hacerla
Se puede realizar en cualquier momento del año. En otoño y en primavera seguro que está preciosa por las tonalidades del bosque.
Punto de salida en Labaniego
Dejamos el coche en el aparcamiento que se encuentra en la entrada del pueblo. La ruta es circular, así que la finalizaremos en el mismo punto.
Allí vemos una señal de la Senda del Mouro y la Ruta del convento de San Fructuoso. Empezamos nuestro recorrido por el camino de la izquierda.

Señal Senda del Mouro
Allí también vimos el día que fuimos alguna cabra corriendo a sus anchas que hizo que el peque alucinara.
La Senda del Mouro
En esta ruta podemos ver la intervención artística en un bosque de inigualable belleza. Los robles, castaños y encinas, junto con los miles de helechos, musgo y líquenes conforman un conjunto mágico.
Todas las obras son respetuosas con el medio ambiente y se integran en él perfectamente. A los más pequeños de la casa les encantará esta ruta, en la que se entretendrán mucho buscando tesoros escondidos en la naturaleza.

Ruta perfecta para niños
El primer tramo de la ruta transcurre por una pista de tierra. A unos pocos metros ya encontramos un dibujo en el tronco de un árbol quemado.

Senda del Mouro
Un poco más adelante llegamos a otra señal, tenemos que continuar por el camino de la derecha. El sendero se estrecha y vemos muchas de las obras en los árboles o en las rocas, piedras apiladas o ramas formando diferentes figuras.
Desvío para ver el Convento de San Fructuoso y la Casa del Mouro
Una señal nos indica el desvío de 200 metros, para ver el convento y la casa del Mouro. Mi recomendación es que te desvíes para verlo porque merece muchísimo la pena.
Enseguida vemos los restos de una casa derruida y muy cerca la Casa del Mouro. La distinguirás porque se encuentra entre dos grandes rocas, marcadas con símbolos, y protegida con un tejado de paja. Rodea la casa y verás el dibujo de un ciervo en la parte de atrás.

Senda del Mouro

Senda del Mouro
En la casa del Mouro hay otra señal que nos indica el camino para llegar al convento. De él quedan sólo los restos, era un convento franciscano llamado San Fructuoso.
Volvemos sobre nuestros pasos para continuar nuestra ruta. En la siguiente y última bifurcación tenemos que seguir todo recto hasta llegar al pueblo.
Desvío para ver el mirador
Al finalizar nuestra ruta podemos subir al mirador que se encuentra junto a la Iglesia de Santiago. Allí vemos una antigua boca mina restaurada, La Canalina, que aunque tenga una verja podemos ver en su interior la virgen Santa Bárbara.
Pero no es la única ruta que podrás realizar en esta zona. Una parte de la ruta transcurre por El Camino Olvidado.
¿Sabías que está considerada, junto con el Primitivo y el de la Costa, una de las rutas jacobeas más antiguas de las que se tiene constancia?
Se cree que esta camino fue utilizado entre los siglos IX y XII. Parte de Bilbao y finaliza en Villafranca del Bierzo. Allí lo puedes enlazar con el Camino Francés o el Camino de Invierno para llegar a Santiago de Compostela.
Puedes seguir la ruta en Wikiloc.