5 Lugares curiosos en la península del Morrazo
En la provincia de Pontevedra podemos recorrer cientos de lugares curiosos. Esta vez nos vamos a conocer algunos del Morrazo, una pequeña península que tiene 40 km de longitud y 10 km de ancho separando las rías de Pontevedra y de Vigo.
Es un paraíso para los amantes de las playas, ya que tienes hasta 38 para elegir. De hecho, tiene una de las playas nudistas más famosa de España, la playa de Barra. Además, puedes realizar rutas tanto de naturaleza como visitando sus increíbles faros, o realizar otras actividades como buceo o snorkel.
Para acceder a El Morrazo desde Vigo tenemos que cruzar el puente de Rande. Un puente icónico que esconde muchos tesoros bajo sus aguas. Una vez que empiezas a cruzar el puente de Rande viene a tu mente la canción del grupo Siniestro Total Yo ya fui a Cangas del Morrazo y empiezas a tararearla.
1.- El Bosque Encantado de Aldán
En Aldán podemos pasear por un bosque encantando. Esta finca, a la que se la conoce como Finca do Frendoal, pertenecía a los Condes de Canalejas. En ella paseaban, cazaban y hasta jugaban al croquet. Sus herederos la donaron al Concello de Cangas.
Es el lugar perfecto para dar un pequeño paseo, ya que a pesar de estar al lado de la carretera, una vez que te adentras en él hay una vegetación tan espesa que no oirás más que los ruidos del bosque.
Lo más llamativo de este bosque es un pequeño castillo que empezó a construirse en los años 60 y quedó inacabado. Rodeado de naturaleza y con parte de su fachada forrada de musgo, es un lugar mágico que no te puedes perder en tu visita al Morrazo. Al lado del castillo podemos ver parte de un antiguo acueducto, un eucalipto centenario, un molino y un antiguo lavadero.
2.- Salinas y Marisma de Ulló en Vilaboa
La sal era el elemento que utilizaban para conservar los alimentos, tanto la carne como el pescado, durante la Edad Media. En el litoral gallego hubo varias salinas muy productivas. Pero con la llegada de las conservas las salinas quedaron en desuso.
En el municipio de Vilaboa se encuentran estas salinas que empezaron a ser explotadas por el colegio de los jesuitas de Pontevedra en 1694. El agua entraba en la laguna por la fuerza de las mareas, permanecía estancada y, cuando llegaba a una temperatura idónea se abrían las compuertas de los cocederos. Allí quedaba durante 15 días al sol para favorecer la cristalización de la sal y su posterior recolección.
Uno de los puntos de interés es el Molino de las Mareas. Este molino hidráulico, que utilizaba las corrientes del fondo de la ría para su funcionamiento, se construyó a finales del siglo XIX y es uno de los pocos que existen en Galicia. Del molino sólo quedan unas piedras, ya que se lo llevaron a Punta do Carregal.
Granja de las Salinas
Otra visita imprescindible, y que a mí fue lo que más me gustó, es la Granja de las Salinas. Se encuentra en el extremo norte del dique de la ensenada, del lado de las marismas. Te tienes que desviar un poco y adentrarte en un bosque, después de caminar menos de 1 km te encontrarás las ruinas de las casas donde vivían los administradores de las salinas y los caseros de la finca. La naturaleza se ha apropiado de estas edificaciones provocando un aura de misterio. En algunas de ellas los árboles crecen en el interior de las casas. Puedes entrar, con cuidado, en algunas de ellas y ver las lareiras, lugar donde se encendía la lumbre.
Estas salinas son el hábitat de diferentes aves como las garzas, patos y cisnes.
3.- Pazo de Lourizán
El pazo de Lourizán era uno de los lugares que más ganas tenía de conocer este verano. Está incluido en el post de 10 lugares curiosos en España. Este pazo, construido a finales del siglo XIX, se encuentra en la parroquia de Santo André de Lourizán. Fue residencia de verano del político Eugenio Montero Ríos y ahora pertenece a la Diputación de Pontevedra. En él se encuentra el Centro de Investigaciones Forestales.
Es uno de los pazos más bonitos que he visto por lo espectacular que es su edificio. Con su aire francés, destacan sus jardines y su escalera de piedra custodiada por estatuas. No se puede acceder al interior del pazo, y da pena ver el estado de deterioro en el que se encuentra. Sí podemos pasear por sus jardines, sus grutas o admirar desde fuera el impresionante invernadero modernista de hierro. También hay un hórreo y una mesa de granito, de 6 metros de largo de una sola pieza, donde se firmaron importantes decisiones políticas.
4.- Monte do Facho
En Donón, en la parroquia de O Hío, se encuentra este misterioso lugar que pudo ser un antiguo santuario romano y donde además podemos ver un poblado castrexo.
Se encuentra al lado de uno de los mejores lugares para ver el atardecer, en la Caracola más fotografiada desde hace años.
Para llegar a lo alto del monte empezamos nuestra ruta por el Camiño dos Lameiros. En él podremos ver, muy bien señalizados, petroglifos de diferentes temáticas y épocas. Unos metros más adelante llegamos a los restos de la aldea de Punxeiro. En ella hay 8 estructuras que se corresponden con viviendas, lugares de almacenaje, o para los animales. Continuamos ascendiendo y llegamos a un pequeño poblado castrexo desde donde ya divisamos el mar y las islas Cíes.
Ya queda poco para llegar a lo alto de la cima y contemplar la Costa de la Vela y las islas Cíes. Allí también se encuentra una estructura circular, una garita de vigilancia, en la que sus bases formaban parte de un antiguo faro medieval que servía para avisar. La forma en que lo hacían era a través de una hoguera de paja mojada que al encenderla formaba una gran nube de humo alertando de que había un peligro. Y es que facho en gallego significa antorcha.
5.- Petroglifos de Mogor
En el concello de Marín, en la playa con el mismo nombre, se encuentran estos petroglifos, también llamados grabados rupestres. Datan aproximadamente del 2000 o 3000 a.C. Entre todos los petroglifos existentes en estas rocas, el que más llama la atención es el Laberinto de Mogor. Sólo hay cinco laberintos grabados en toda Galicia. No se sabe cuál es su significado, pero hay semejanza a otros encontrados en otros países como Islandia o Finlandia.
Son varios los yacimientos arqueológicos y monumentos megalíticos que podemos conocer en el Morrazo.
Existe un Centro de Interpretación donde a través de unos paneles interpretativos nos explican el arte rupestre y lo importante que es este conjunto de petroglifos, también hay visitas guiadas.
Como puedes comprobar hay muchos lugares muy interesantes y curiosos para conocer en la península del Morrazo, además de playas impresionantes. Mi recomendación es que te alojes en esta zona para aprovechar los días. Los Apartamentos Ría de Aldán están muy bien situados para disfrutar al máximo de esta zona.